martes, 16 de junio de 2009

Andrei Alfonso.


“Hubo un tiempo en que no existía basura en el planeta, un tiempo en el que no existía nada que no fuese necesario.”

Teresa Wong (Earth Girl Arjuna)


Al momento que inicio este recorrido, he vivido experiencias que me han hecho forjar mi carácter, todos pasamos el mismo proceso, lo que nos diferencia únicamente son las experiencias y el cómo consideramos las mismas, de aquí que en ocasiones he creído que mi vida es única e irrepetible, en un sentido estricto llevado al extremo, así es, solo que ocasionalmente olvido que me mueve, mi motivo, dejando esa responsabilidad a la mediocridad, puesto que ni siquiera recuerdo la última vez que sentí pasión y vaya que la parte difícil es recobrar el sentido, el despertar de nuevo en este paseo, en este momento, a esta vida.


Cuando busco razones, generalmente me engaño, me quedo divagando, y vaya que en este arte de hacerse pendejo me pinto solo, acostumbrado a buscar el ¿por qué?, nunca dejando a mis sentimientos florecer, ya sea por tapujos o ideas corrosivas, sin permitirme que esto continúe como un viaje a la nada, lleno de espinas y caramelos, un eterno presente, dejo por lapsos prolongados de admirar cuanto a mi alrededor se encuentra y sobre todo, permitirme sentir que solo soy uno más, ¡puedo ser la diferencia en el momento que me lo proponga!, cierto, pero mientras no me demuestre ese punto solo soy un caminante; el final de este paseo será el que yo decida, otra verdad que me aturde. Siendo sincero, caigo en robar ideas que, si, por un momento tapan eso que llamo vacio, pero, ¿quién si no yo puso dicho vacío?, y es ridículo cuando lo veo y cada vez se amplía este espacio muerto, parece ser una deuda con intereses elevados, como si un usurero abusara de mi; ¿qué peor abusivo que yo, hacia mí?


Hubo un tiempo en mi mente que no existía basura, un tiempo en el que no existía nada que no fuera necesario, ¡ya se cuales son las causas de esas piedritas en mi cabeza!, por instantes que me desvió del presente, he protestado contra ellas, queriéndolas asustar con mis quejidos de bebe sin mamila, aun no me ha funcionado esa opción. Hoy quiero intentar algo distinto, algo que realmente funcione. No lo he visto, no lo he conseguido, no lo conozco. De algo estoy seguro, duele, y es por eso que hasta ahora, cuando realmente me dan ganas de vomitar por lo que pienso, me he tomado la tarea de encontrarme.

4 comentarios:

  1. es ironico el sentirte mal estando vacio, no crees?

    en fin buen consejo ese del vodka eh!

    ResponderEliminar
  2. Creo que es esta maldita madurez a la que nos resistimos hacernos acredores.

    ¿Y que si eres unico? claro que lo eres si no quien hubiera posado para esa foto tan bien como tu jaja ;) (mi favorita) jajaja

    Cuando vomitas por lo regular se viene todo no solo lo malo asi que no vomites lo que piensas si no quedaras seco!!! aprende a digerir y a actuar!!!

    Te quiero un chorro amigo
    saque el te!!! que el finde estubo seco!! ja

    ResponderEliminar
  3. sentirse mal...
    amm,
    me gustaria que alguien me lo explique, porque solo pensar en eso me hace ruido, ya me canse de las dicotomias.

    ResponderEliminar
  4. vomitar...
    lo tomo como una analogia,
    quedar vacio, y despues con la satisfaccion de haber sacado lo que mi cuerpo no quiere,
    en realidad sacas solo lo que no vas a digerir.

    que rico es vomitar despues de la cruda.
    :]

    ResponderEliminar